Franco Colapinto, visita y asado junto a la familia Briatore en Mónaco
En medio de especulaciones sobre su futuro, el piloto argentino de la escudería Alpine mantuvo un encuentro muy especial con su principal impulsor dentro de la escudería francesa y su familia en la previa del Gran Premio de Miami, que se correrá el 4 de mayo. Asado, Maradona y rumores de la F-1.

Franco Colapinto formó parte de un encuentro bien argentino, del que se viralizaron imágenes comiendo un asado y junto a un personaje muy cercano a su trayectoria deportiva, decisivo en su llegada a la escudería francesa Alpine de la Fórmula 1, el italiano Flavio Briatore.
Según se confirmó en las últimas horas, Colapinto no viajará a Miami y se quedará trabajando en el desarrollo del A525 con el simulador en la sede de Alpine en Enstone, para que el francés Pierre Gasly y el australiano Jack Doohan cuenten con parámetros de cara a las carreras, como ya sucedió en los últimos Grandes Premios de Bahréin, Arabia Saudita y ahora también el de Miami.

No obstante, las especulaciones sobre su futuro inmediato y las chances de subirse como piloto titular a una butaca de Alpine van en aumento y este viernes sumó un nuevo capítulo, con las imágenes de un nuevo encuentro con parte de la familia Briatore.
Colapinto fue recibido en su casa del Principado de Mónaco por Nathan Flavio Briatore, segundo hijo del asesor ejecutivo de Alpine, que impulsó el desembarco del argentino en la escudería francesa esta temporada.

Así lo demuestra una serie de fotos publicadas por el hijo de Flavio y la ex modelo italiana Elisabetta Gregoraci, que se viralizaron a través de las redes sociales sobre su encuentro en Montecarlo. De hecho, hay versiones que indican que Franco Colapinto tendría como nuevo lugar de residencia a Mónaco.

Mientras, el próximo fin de semana se disputará el Gran Premio de Miami en los Estados Unidos, donde finalmente, el estonio Paul Aron será el tercer piloto de Alpine, con el argentino desde el simulador y en medio de especulaciones de que podría ocupar la butaca dos del A525 en Ímola.