El equipo de Marcelo Gallardo venció 3-1 al último campeón del fútbol argentino, que terminó con diez por expulsión de Marcos Portillo, en un partido donde exhibió algunas virtudes y las mismas falencias del campeonato pasado.
El partido en el Gigante de Arroyito terminó 1-1 por un gol del Tomba en el quinto minuto adicionado. El árbitro Pablo Dóvalo sancionó una discutida falta que Fideo facturó a los 33 minutos del segundo tiempo. Sobre el final, el carrito lo sacó de la cancha con un dolor en la pierna derecha.