Selección Argentina: otro año de gloria, en lo más alto
El seleccionado argentino tuvo otro año histórico con la conquista de la Copa América en Estados Unidos que lo mantuvo en lo más alto del fútbol sudamericano y mundial, algo que se ratificó en las Eliminatorias pese a algunos resultados inesperados, con un nivel que le permite soñar con la clasificación y defensa del título en 2026
Para empezar a repasar el 2024 del seleccionado argentino es inevitable retroceder unos meses y situarse en el estadio Maracaná de Río de Janeiro. Después del histórico triunfo contra Brasil por Eliminatorias con el gol de Otamendi, Scaloni sorprendió a todos y puso en duda su continuidad en el cargo aduciendo que necesitaba “pensar”.
La bomba recién se desactivó a principios de año pero recién se escuchó la versión oficial del entrenador antes de los amistosos de marzo en Estados Unidos ya que hasta ese momento no sabía qué pasaba por la cabeza del conductor de la Scaloneta.
“Nunca dijimos de no seguir. Necesitaba reflexionar, parar la pelota y pensar después de un año difícil en el que pasaron muchas cosas. También tenía cosas personales y a partir de ahí debía tomar decisiones. Lo mas importante ahora es saber que estamos fuertes, pero los plazos nunca se saben. Sigo y punto”, expresó Scaloni en la primera conferencia que brindó como DT de la Selección después de aquella en Brasil.
Sin Messi por lesión y con una gira armada a las apuradas tras la suspensión de un viaje a China, el seleccionado abrió la competencia 2024 con dos partidos de preparación ante El Salvador y Costa Rica en Estados Unidos que se resolvieron sin problemas con sendos triunfos.
Más amistosos y el armado de la lista
Con el regreso de Messi, el seleccionado disputó otros dos amistosos en Norteamérica en la última ventana oficial previa a la Copa América.
El capitán llegó cargado por una molestia en Inter Miami y Scaloni lo cuidó para el primer amistoso contra Ecuador.
El último ensayo fue ante Guatemala con el 10 desde el arranque y una goleada 4-1 que también tuvo la buena aparición de Valentín Carboni en el equipo.
Como sucedió con Enzo Fernández en la previa de Qatar, Messi le dio su bendición al zurdo que se metió en la lista final como una de las principales novedades dentro de una convocatoria con 21 de los 26 integrantes del plantel campeón del Mundo.
Copa América, el gran objetivo del año
Finalmente llegó la competencia y Argentina tuvo un arranque perfecto en la fase de grupos con tres triunfos y sin goles en contra: 2-0 a Canadá en el debut, triunfo ajustado por 1-0 contra Chile y con la clasificación asegurada, victoria 2-0 con suplentes triunfo ante Perú.
En cuartos de final el rival fue Ecuador y nuevamente apareció el Dibu Martínez para salvar.
Argentina se puso en ventaja en el inicio del partido por el gol de Lisandro Martínez pero en tiempo de descuento, Kevin Rodríguez igualó el trámite.
Messi abrió la serie fallando su tiro después de intentar picarla pegó en el travesaño. Dibu volvió a vestirse de héroe deteniendo dos penales
En la semifinal, otra vez un nuevo cruce con la sorprendente Canadá. A diferencia del debut, el gol llegó más temprano con un pase exquisito de De Paul para Julián Álvarez, autor del 1-0 y después, Messi apareció para definir el partido con su único gol del torneo.
Sin brillar, pero con contundencia y de manera invicta, Argentina llegaba a nueva final de Copa América y Colombia, con Néstor Lorenzo en la conducción, pretendía quitarle la corona a la Scaloneta después de haber dejado en el camino a la Uruguay de Bielsa que se perfilaba como candidata al título.
La final fue dramática desde la previa porque la seguridad local se vio desbordada y no pudo detener el vendaval de hinchas que intentaron pasar sin entrada.
La Conmebol no estuvo a la altura de la situación y la única reacción fue demorar por más de una hora el inicio del partido.
Cuando por fin comenzó el juego, a los 33 minutos del primer tiempo, Messi intentó meterse en el área de Colombia y cuando quiso tirar un centro desde la izquierda recibió una patada de Arias en el pie izquierdo por parte del lateral pero en la misma acción se dobló el tobillo derecho. El 10 quedó visiblemente sentido y fue atendido durante unos minutos por médicos.
El capitán pudo terminar la primera etapa y aprovechó el largo entretiempo por el show de Shakira para tratarse el dolor en el tobillo. Sin embargo, en el minuto 62 no dio para más, intentó correr desde atrás a Luis Díaz y se cayó al piso.
Durante el suplementario, Scaloni realizó un triple cambio que fue determinante en el desenlace de la historia. Dejaron la cancha Julián Álvarez, Enzo Fernández y Alexis Mac Allister para el ingreso de Leandro Paredes, Giovani Lo Celso y Lautaro Martínez.
En la parte final, precisamente en el minuto 112 del partido, Paredes la recuperó, se la pasó a Lautaro que pivoteó y la devolvió. El 5 vio solo a Lo Celso en el medio y el zurdo con un toque magitral asistió de primera al Toro.
Lautaro recibió, se perfiló y con un derechazo cruzado marcó el ansiado gol que significó la victoria y la 16ta Copa América para la Albiceleste.
En los minutos finales, Argentina enfrió el partido y tuvo tiempo para homenajear a Di María que tuvo su cierre soñado en el seleccionado.
Y con el pitazo el brasileño Claus llegaron el desahogo y los festejos por el seleccionado bicampeón de América.
La vuelta a las Eliminatorias Sudamericanas
Con la alegría latente por el cuarto título del ciclo de Scaloni, el seleccionado se reencontró con el público argentino y jugó por primera vez en el año en suelo nacional en septiembre para reiniciar las Eliminatorias sudamericanas.
Por la fecha 7, Argentina recibió a Chile en un estadio Monumental que no pudo estar a tope por una sanción, pero que recibió con todo el cariño a los flamantes bicampeones.
La previa, además, tuvo su momento emotivo ya que fue la despedida de Di María, acompañado de su familia y rodeado del amor de sus compañeros.
El triunfo sobre Chile confirmó el liderazgo del equipo en el certamen clasificatorio en la vuelta a la competencia y sacó el partido adelante pese a la ausencia de Messi, todavía impedido de jugar por la lesión en el tobillo.
Unos días después, el seleccionado tuvo que viajar a la siempre difícil Barranquilla para enfrentar a una Colombia envalentonada por las ganas de tomarse revancha de la final perdida meses atrás en Miami.
El vigente campeón del mundo no tuvo un gran partido pero aún no mereció irse sin nada de Colombia y perdió por primera vez como visitante en Eliminatorias con Scaloni como entrenador.
En octubre y con la vuelta de Messi, Argentina visitó a Venezuela en Maturín en un partido completamente desvirtuado por el estado del campo de juego afectado por una lluvia torrencial sucedida a poco del comienzo del partido.
Pese a las dificultades, la Albiceleste abrió el marcador con Otamendi y estuvo cerca de llevarse el triunfo, pero se tuvo que conformar con el punto tras sufrir un cabezazo de Rondón en el tramo final.
El reencuentro de Messi con los hinchas argentinos fue con show y goleada 6-0 ante Bolivia en una noche inolvidable para los miles que coparon el Monumental. Un detalle importante de este partido fue que sobre el final se produjo el debut de Nico Paz, una de las joyas que tiene para pulir Scaloni.
La última doble fecha se inició nuevamente fuera de casa y la Scaloneta recibió otro golpe inesperado con la derrota 2-1 en Asunción ante la Paraguay de Alfaro, después de haber arrancado en ventaja por el gol de Lautaro.
La revancha llegó rápido y a los pocos días, el seleccionado tuvo su cierre en La Bombonera con un ajustado triunfo ante Perú que se definió por la genialidad de Lautaro Martínez que conectó un preciso de Messi
Esta victoria le permitió al seleccionado terminar el año como líder de las Eliminatorias con 25 puntos, con cinco de ventaja sobre Uruguay y a seis de Ecuador, y a un paso de la clasificación al Mundial 2026. Además, significó mantenerse en lo más alto del ranking de la FIFA como desde abril de 2023 por encima de Francia y España que estaban pisando los talones.
Balance y ¿Renovación?
El seleccionado coronó un nuevo año perfecto en cuanto a resultados y objetivos, pero de cara al 2025 queda latente la advertencia que lanzó Scaloni: “A partir de ahora necesitamos que todos jueguen en sus clubes”.
El entrenador explicó que para el ajustado segundo tramo del 2024 no tuvo tiempo de aplicar el recambio que pretendía y decidió seguir convocando a la “base” de los equipos campeones tanto en Qatar como en Estados Unidos, pero que a partir de ahora armará las listas a partir del “nivel futbolístico” de cada uno en sus respectivos equipos.
La vuelta en marzo de 2025 será con dos pruebas durísimas ya que primero visitará a Uruguay, en Montevideo, y luego recibirá en Brasil en casa.
Ya habrá tiempo para esos desafíos, mientras tanto brindemos por un 2024 en lo más alto y una Copa más en la vitrina.
