El Gringo Scotta, dueño de un récord que nadie pudo superar
En la temporada 1975 en el fútbol argentino, el goleador Héctor Scotta firmó 60 tantos en 57 partidos para un San Lorenzo que no fue animador en el Metropolitano y que mejoró en el Nacional, aunque lejos estuvo de pelear por la vanguardia
Un record que aún permanece vigente desde hace cinco décadas. Porque con los dos tantos que marcó ese 28 de diciembre de 1975 ante Gimnasia y Esgrima de Jujuy en un triunfo por 3-0 en cancha de Huracán, Héctor Horacio Scotta llegó a la suma de 60 conquistas en la temporada para un San Lorenzo, que no fue protagonista ni en el Metropolitano ni en el Nacional de ese año.
Ninguno otro jugador marcó semejante cantidad de goles en un año calendario en el fútbol profesional argentino. Recién un tal Lionel Messi, pero en España y en 2011, anotó la bestial cifra de 91 tantos para un Barcelona que rozaba la perfección.
Para dar cuenta la magnitud de lo que logró el artillero nacido en la localidad de San Justo hace 75 años ni siquiera Diego Armando Maradona estuvo cerca en su mejor año en el fútbol local. En 1980 y con la camiseta de Argentinos Juniors, el 10 eterno del seleccionado argentino firmó 43 tantos.
En un período en el que brillaban grandes goleadores como Mario Kempes (Rosario Central), Carlos Morete (River Plate) u Oscar Fachetti (Talleres de Córdoba), el Gringo supo destacarse por las virtudes que mostró en su vasta trayectoria deportiva.
El delantero, que solía desempeñarse como puntero derecho, exhibió las armas de siempre en esa temporada mágica: un potente remate; un letal cabezazo y una capacidad implacable en la definición. También demostraba una sugestiva facilidad para tirar diagonales y aparecer por sorpresa, mano a mano con los guardavallas rivales. Además, el santafesino anotó 7 penales.
Tardes para el recuerdo en ese año? En abril y en el Viejo Gasómetro le marcó 4 a Chacarita Juniors (4-2), por el Metropolitano; en diciembre ya, el Gringo festejó por triplicado en un 4-0 sobre Atlético Tucumán (en cancha de San Martín) en el arranque del Torneo Final del Nacional.
Y unas semanas antes, en noviembre, Scotta marcó dos recordados tantos en la Bombonera en un 5-3 pletórico sobre un deshilachado Boca Juniors, en donde quebró el registro que hasta ese momento enarbolaba el paraguayo Arsenio Erico (Independiente), quien había festejado 47 goles en el Campeonato de Primera División 1937.
En el club de Boedo, donde tuvo dos períodos (1971-1976 y 1981), el Gringo festejó 140 goles en 226 partidos. Se inició en Unión de Santa Fe y tuvo un exitoso ciclo de cuatro temporadas (1976-1980) en el Sevilla de España, donde también es auténtico ídolo como en el Ciclón.
También jugó en Ferro Carril Oeste (1980) y Boca Juniors (1982). En el ascenso repitió el rito de elevar la mano derecha, besarse la camiseta y festejar de cara a su tribuna cuando pasó por Deportivo Armenio (1983-1984), All Boys (1985), Nueva Chicago (1986), Villa Dálmine (1987), San Miguel (1987-1988) y Estudiantes de Caseros (1988).
Pero en ningún lado rindió como en San Lorenzo, hinchada que lo adoptó como emblema y mito de una época de vacas flacas, que terminó con la peor de las pesadillas: el descenso a la Primera B en 1981
Héctor Horacio Scotta, el delantero de los 60 goles en 57 partidos; el jugador que marcó el 55 por ciento de las conquistas que el Ciclón firmó en ese 1975 (108); el goleador ortodoxo que mantiene un récord que suena a insuperable.
