La dura confesión de un ex NBA y Generación Dorada: "Mi cabeza quedó atrapada ahí"
Uno de los campeones olímpicos confesó el difícil momento que atraviesa después de haberse retirado de la actividad profesional. "Me niego a llamarme retirado, soy no activo".
La Selección Argentina tiene un logro que pocos equipos consiguieron en la historia del básquet: la medalla olímpica dorada. Solamente la consiguieron Estados Unidos y las extintas Yugoslavia y la Unión Soviética.
Es por eso que la confesión de Carlos Delfino cobra sentido acerca del partido homenaje a los 20 años: “Mi cabeza quedó atrapada ahí, fue un quiebre. Me di cuenta que el sistema operativo era viejo. Me entré a vaciar y me cansé”.
La fiesta celebrada en el Parque Roca hace un año atrás contó con la presencia de los campeones olímpicos: Emanuel Ginóbili, Luis Scola, Andrés Nocioni, Fabricio Oberto, Juan Pepe Sánchez, Alejandro Montecchia, Walter Hermann, Gabriel Fernández, Hugo Sconochini (capitán del equipo), Leonardo Gutiérrez, Carlos Delfino y Rubén Wolkowyski.
Jugar este partido le trajo algunos problemas a Delfino en su ex club: Benedetto XIV Cento en la Serie A2 italiana. “No les gustó que falte a dos partidos por venirme al homenaje”.
“La nostalgia, el reencuentro, era la primera vez que nos juntábamos los 12 de nuevo desde el podio en Atenas. Y fui a Mendoza después de viaje porque me insistieron, y llegó un momento que se hizo miércoles y no fui a jugar, y llegué un viernes allá”, contó en la nota brindada al sitio Básquet Plus.
La vuelta no fue sencilla mentalmente para el Lancha, que se dio cuenta que ya su carrera deportiva estaba finalizada. “No pude ni siquiera terminar la temporada. Estaba sin motivación”.
“Por primera vez dije que no me daban ganas de empezar. Tuve ofertas, incluso de Argentina. No extraño el básquet jugado, estoy enganchado con mis otras cosas. No me gusta la palabra retirado, soy un no activo”, finalizó.
